Filmfilicos blog de cine
Home Filmblog Películas Shazam!

El universo cinematográfico de DC sigue su redención en cuanto a la adaptación de sus cómics se refiere. Después de comprobar que se le da mejor héroes en separado que en conjunto (véase El Hombre de Acero, Wonder Woman, y Aquaman) le tocaba el turno a ¡Shazam!, y es la película de la que hoy os vengo a hablar. Después de un breve resumen de la trama, claro.

La vida del huérfano Billy Batson (interpretado por Asher Angel) es un continuo dar tumbos de una casa de acogida a otra por su dudoso comportamiento. En cierto momento acaba en una casa de acogida con varios niños como él, donde acaba siendo compañero de habitación de Freddy (Jack Dylan Grazer), quien tiene un gran conocimiento sobre los superhéroes que están entre nosotros. Un día, cuando Billy escapaba de la inminente paliza de unos matones del instituto, acaba siendo convocado a un extraño templo antiguo. Allí un anciano (Djimon Hounsou) le dice que ha sido elegido para ser el paladín, y le otorga la sabiduría de Salomón, la fuerza de Hércules, la resistencia de Atlas, el poder de Zeus, el coraje de Aquiles, y la velocidad de Mercurio. Con todo ello consigue transformarse un poderoso ser al grito de ¡SHAZAM! (Zachary Levi), y recurre a su amigo Freddy para su aprendizaje como superhéroe. Pero todo ello se podría ver interrumpido por Shivana (Mark Strong), que no hace mucho se hizo uno con los siete pecados capitales que custodiaba el anterior portador de Shazam, y pretende arrebatarle los poderes al nuevo, es decir Billy Batson.

¡Shazam!

El apartado visual de esta película es bueno, aunque si es verdad que los efectos especiales no pasan de lo pasable. Esto es algo que igual muchos vaticinaban, ya que se avisó que la cinta partía con poco presupuesto. La banda sonora es también bastante destacable, tiene temas que se adhieren de manera genial a las escenas y el tono de la película, que es bastante más desenfadada que otras de este universo cinematográfico.

En el elenco interpretativo tenemos grandes joyas. Y no me estoy refiriendo a Mark Strong, al que cada vez veo más complicado que algún papel se le resista, y Zachary Levi, quien interpreta a un Shazam tras el que se oculta un niño totalmente creíble; si que no hablo de los actores y actrices menudos. Destacan por supuesto Asher Angel y Jack Dylan Grazer ya que tienen más peso en la trama, pero el resto aunque tienen papeles pequeños son brillantes. La dirección corre a cargo de David F. Sandberg quien se ha centrado en la etapa llevada por Geoff Johns del personaje.

¡Shazam!

Quizás aquí resida la razón por la que me ha gustado tanto. Y es esa semejanza con Big, que no solo la abraza, si no que hace múltiples referencias. Por supuesto a ello hay que sumarle que todos los lectores de cómics de superhéroes (y algún que otro ajeno más) hemos soñado con ser uno. Esa manera de despertar nuestro niño (o no tan niño interior), y no como piensan otros, que está más enfocado a los pequeños. No me malinterpretéis, seguro que disfrutan, pero eso no quita que a nosotros nos invada cierta nostalgia, algo con lo que juegan de manera genial.

En definitiva, ¡Shazam! ha conseguido contar de manera distinta y divertida los orígenes de un superhéroe verdaderamente importante y todo ello con un presupuesto bastante reducido. Al margen de lo que me haya gustado personalmente, no creo que nadie niegue que esto es algún tipo de logro. DC se encuentra en el buen camino, ojalá siga así bastante tiempo.

Si un superhéroe no puede salvar a su familia ¿qué clase de héroe es?

Responder

  He leído y acepto la política de privacidad de filmfilicos.com

Información sobre protección de datos

  • Responsable: Rafael Mollá Sanmartin
  • Fin del tratamiento: Controlar el spam, gestión de comentarios
  • Legitimación: Tu consentimiento
  • Comunicación de los datos: No se comunicarán los datos a terceros salvo por obligación legal.
  • Derechos: Acceso, rectificación, eliminación y olvido.
  • Contacto: contacto@filmfilicos.com.
  • Información adicional en: nuestra política de privacidad.