Cómo entrenar a tu dragón 2
“Cómo entrenar a tu dragón 2” está nominada a mejor película de animación en los Oscar 2015 y parece que tiene bastantes posibilidades de hacerse con el premio. Yo no os voy a mentir, a mi me pareció peor que la primera parte y os voy a contar por qué.
En esta segunda parte veremos a Hiccup y amigos, ya bien adolescentes, enfrentándose a un villano que amenaza con romper la paz de la aldea pretendiendo acabar con todos los dragones. Un planteamiento en principio más oscuro que la anterior, con una trama en teoría algo más adulta pero como siempre tratando de que disfrute nuestro niño interior y nuestro hombre mayor exterior, lo malo es que en esta ocasión se queda a medias.
Para empezar un gran problema, los secundarios, esta vez están muy de relleno, sí que son un desahogo cómico eficaz alguna vez, pero aportan tan poco a la trama que podrían haber sido totalmente prescindibles, incluso Astrid, la feroz guerrera de la primera entrega que ponía en más de un apuro a nuestro protagonista, en esta se queda muy descafeinada, pasa a ser la novieta de Hiccup y con eso ya tiene suficiente. De la misma forma que se ha desaprovechado el nuevo personaje llamado Eret, el que podría haber servido para algo más que una simple broma recurrente.
Ciñéndonos un poco más a la trama y en concreto al conflicto personal de Hiccup: debe estar preparado para en algún momento ser el líder de la aldea. La forma en la que esto se lleva a cabo es predecible a la par que innecesaria tratando de dar a ese punto de giro un carácter dramático que imagino sería para tratar de parece un film más adulto, pero que realmente pasa a engordar la lista de clichés que vamos viendo a lo largo de la película.
Pero tampoco iba a ser todo malo, el villano, Drago, es un personaje perfectamente caracterizado y un antagonista ideal para Hiccup y por supuesto Desdentao, que todo hay que decirlo, como pareja funcionan de maravilla, tal vez ese sea el motivo del problema con los secundarios que comentaba anteriormente.
Por último hay que destacar el gran trabajo técnico de Dreamworks, se nota que están unos peldaños por encima que la primera entrega y aunque está claro que visualmente no están al nivel de Pixar, realmente no es algo que les debiera preocupar porque contando buenas historias para mi eso queda en un plano mas secundario, la mala noticia es que ya sabemos que a Pixar tampoco se le da mal contarnos las suyas.
En resumen, “Cómo entrenar a tu dragón 2” es peor que la primera parte, donde los secundarios han perdido fuelle y que trata de compensar la falta de frescura general con giros predecibles.
