Mad Max: Furia en la carretera
Reconocedlo, cuando llega a vuestros oídos que se va a hacer un remake o reboot de alguna de vuestras películas favoritas os entra el canguelo, al igual que a mi. Pero de vez en cuando nos podemos llevar una grata sorpresa, y mas si vas al cine de forma furtiva y desinteresada. Para esto, también es verdad, que ayuda que la franquicia o película original haya sido medianamente buena, y que para el nuevo proyecto tanto director, guionista, y actores interesen. Esto ha pasado con Mad Max, una trilogía de la que guardaba muy buen recuerdo, me asuste un poco al oir que volvía al cine, y aun estoy alucinando de lo que he visto.
Para esta nueva entrega nos encontramos a un Max Rockatansky (interpretado esta vez por Tom Hardy) quebrado mentalmente, al que rápidamente capturan los War Boys, los belicosos lacayos de Immortan Joe (Hugh Keays-Byrne). Este pintoresco (como nos tiene acostumbrados esta peculiar saga) y decrepito señor de la guerra controla una de las ciudadelas que resisten a este yermo post-apocalíptico que antes conocían como Tierra. Pero esta comunidad no se puede abastecer de todo, así que tiene que ir a otra ciudadela vecina (comandada por otro caudillo) a por una gran carga de gasolina, y a otra a por armamento y munición. De esta tarea se encargaría, Imperator Furiosa (Charlize Theron), la cual es uno de sus cargos de confianza de Immortan Joe, o al menos eso creía…ya que esta se desvía del trayecto, porque en el interior del tanque de gasolina, que solo ella puede conducir con soltura, lleva a las cinco esposas-criadoras de este, para ponerlas a salvo en un lugar mas tranquilo. En este momento son alertadas todas las comunidades vecinas, incluido el lugar donde se encontraba Max, que al ser donante universal estaba siendo usado como “bolsa de sangre” para Nux (Nicholas Hoult), que es un War Boy aparentemente enfermo. A partir de aquí todo se convierte en una persecución frenética por parte del ejercito de aliados de Immortan Joe para intentar detener a Imperator Furiosa, la cual encontrará en Max un extraño y desequilibrado aliado…
Esta película se me ha estado resistiendo a su visionado: suelo ir a ver al cine algunas películas (pero suelo seleccionarlas con mucho cuidado, que esta el asunto como para tirar dinero…), en principio no despertó mucho mi interés, pero algún amigo que otro fue diciéndome que era digna de ver. Así que fue pasando el tiempo y no conseguí ir a verla, y creerme que el destino se puso en contra varias veces…no ha sido hasta esta semana hasta que descubrí que un familiar la tenia en blu-ray y la pedí prestada para verla en mi reproductor tranquilamente en mi casa. Y así como decía un poco mas arriba, aun estoy alucinando.
Porque en sus 120 minutos de cinta apenas da un momento de respiro. El director, que sigue siendo el mismo que en la trilogía original, ha sabido adaptarse muy bien a los nuevos medios (ya que la ultima data de 1985). Y aunque el guión no sea de lo mas entramado como viene siendo habitual en la saga, es impecable visualmente: esos tonos amarillos y sepias diurnos, azules y en blanco y negro nocturnos; ademas de nitidez en lo que estamos viendo. El elenco de actores aunque es mas amplio de lo que he mencionado yo, he decidido mentar a los mas famosos, y con ellos la película ya hubiera funcionado, pero los extras y secundarios también son de aupa. Pero centrándonos en los principales, Tom Hardy a cada película nueva demuestra que se le puede pedir cualquier papel, y que decir de Charlize Theron…que por mucho que tenga 40 años, sigo fuertemente encandilado de ella (bueno igual con 70 años ya no…). La banda sonora, por su parte, cumple el cometido de complementar esa tensión asfixiante que ofrece esta película.
En resumen una puesta a punto de una saga, que he de confesar que ya me encantaba (y ha sido referente en otras adaptaciones), y quizás no sea una película muy profunda, pero es de las propuestas recientes mas interesantes que hay. Quizás no podrá igualar a mi favorita de la trilogía original (que mas adelante ya os contare cual es), pero he de decir que le sigue muy de cerca. Si no me creéis vedla y…:
¡¡¡SED TESTIGOS!!!
