La verdad que con el final que le dieron a “Crank, veneno en la sangre”, era complicado hacer una segunda parte, pero los directores dijeron, además, que la historia continuaría a partir de ese final, por lo que debieron preguntarles, que como lo harían, a lo que tuvieron que responder: “Con dos cojones”. Y así es exactamente como empieza la película.
Eso sí, Crank 2, es más de lo mismo (que la uno), adrenalina a tope, un no parar, acción en cada rincón, con lo bien que se le da Jason Statham. Pero aunque no aporte casi nada nuevo, si cuando terminas de ver Crank 1 piensas “Joder como mola esta peli, esa forma de realizar toda la acción… que peli podría ver ahora que fuera del royo?” Pues ninguna mejor que la segunda parte.
Cuando escribimos el post sobre Crank éramos seres imberbes, inocentes, inmaduros (hace dos años) y ni tan siquiera mencionamos a la novia de Chev Chelios (Statham) en el film (Amy Smart) que le da un toque muy morboso, más que por ella por el papel que tiene, pero por ella también claro. La escena que más gracia me hace es en la que Statham se pone a silbar al son de la música, que aunque es una tontá siempre me gusta cuando interactúan con la BSO.
Están pensando hacer una tercera parte… y creo que si ésta ya estaba de más, la siguiente será el declive total, pero para saberlo tendremos que esperar un tiempo.
