Cruella

Disney se ha propuesto realizar live action de prácticamente todas sus películas, incluso de personajes que fueron secundarios y también villanos. En este sentido Angelina Jolie fue la primera en encarnar a un antagónico en Maléfica, filme infantil que contiene la esencia del estudio pero no la madurez de lo que se espera cuando el producto se aleja de la animación. Una de las cintas más esperadas y que se vio afectada por la pandemia, fue Cruella de Craig Gillespie (I Tonya , La hora decisiva, El chico del millón de dólares). Al fin ya hemos visto de manera simultánea en cines y streaming el resultado final, esta es sin dudas la película live action que debía ser.

Sinopsis
Explora los rebeldes comienzos de una de las villanas más conocidas del cine y famosa por su elegancia: Cruella de Vil. Ambientada en el Londres de los años 70, en plena revolución del punk rock, la película muestra a una joven estafadora llamada Estella, así como la serie de acontecimientos que la llevan a asumir su lado malvado y a convertirse en la estridente y vengativa Cruella.

Mi recepción
Al estrenarse el tráiler primeramente pensé en que sería un fracaso por innecesaria y porque es imposible reemplazar a Glenn Close. También pasó por nuestras mentes que habían copiado algo del Joker y de Harley Quinn. Daba miedo, incluso sentí cierta predisposición antes de verla. Me alegra decir que ha sido una sorpresa muy grata.

La película
Lo primero que hay que decir y aplaudir es que Gillespie se ha despegado de todo el pastel, y confeti que presume cualquier película de la compañía y eso es fantástico.

Cruella es un filme totalmente independiente de la del 96, en todos los sentidos, vamos a conocer los inicios de esta mujer con un gusto exquisito para la moda y que ama a los perros. La cinta atrapa por su apabullante dirección de arte, el maquillaje, vestuario y escenografía son imponentes, dignos de nominar por la Academia. Por otro lado tenemos la banda sonora, que es una mezcla de Sinatra, Bee Gees, Nina Simone, Queen y Tina Turner.

A diferencia de otros live action no es aburrida, incluso su metraje se justifica pues durante la primera etapa vemos a Estella y ya luego a la Cruella que todos conocemos, la mutación está bien pensada. La película en el tono y la forma es diferente a Cenicienta o Aladdin. Gillespie no copia , no quiere que te aferres a lo que viste hace años, no necesita que comparemos, simplemente ha creado una historia totalmente nueva, con voz propia.

El reto de Stone
Con Emma Stone me ocurrió lo mismo que con Matthew Mcconaughey y Joaquin Phoenix, sus primeros papeles me resultaron desastrosos y no lograban transmitirme credibilidad. La novia de Spiderman, musa de Allen y de Iñárritu, sin embargo cuando vi La batalla de los sexos, ya Stone no era la misma, había cierta madurez, se notaba que estaba trabajando de otra forma. Lanthimos la elige para La favorita y luego de eso pues no queda más que rendirse a sus pies.

Ponerse en los piel de Cruella era muy complejo, tenía la sombra de Cloose y eso es traumático para cualquier actor. Su actuación es fenomenal, la forma en que maneja el tono de voz, como camina, la expresión de su rostro, sencillamente ha construido una villana de ensueño.

Emma Thompson ha llegado a un nivel en su carrera de cierta comodidad, reconocimiento, se ha encasillado y no logra brillar o dar algo nuevo. Muy divertidos Joel Fry y Paul Walter Hauser. Para los nostálgicos una escena post créditos sorpresivamente hermosa.

Ojalá Disney se aconseje y tome a Cruella como referencia para sus próximos trabajos, aunque creo que les va a costar superarla.