Vi la película estimulado por la crítica de los de enDiferido, pero es que soy un entusiasta de los films de adolescentes (por ejemplo este o este) y si éstos son unos “frikis” empedernidos y están cargados de mil problemas aún me interesa más. Y me atraen tanto porque estas películas suelen transmitir ese torrente de sentimientos a flor de piel, de nuevas experiencias y de descubrir tantas y tantas emociones, algo muy característico de esa maravillosa e interesante etapa de la vida, que parece que muchos han olvidado, y por eso, seguramente, no sepan apreciar este tipo de films.
Justificada mi atracción por este género (o eso creo) entraré en materia. La película no cuenta nada que no se haya visto ya, pero el par de vueltas de tuerca que el director Stephen Chobsky le da a un joven, introvertido y marginado enfrentándose a problemas familiares, de amistad, de primeras citas, de sexo, drogas y fiestas… es muy interesante y atractivo.
El protagonista es encarnado por Logan Lerman que lo hace genial, pero si alguien destaca en esta película es el secundario Ezra Miller, que en su papel de amigo homosexual nos delita con una interpretación sublime incluso haciendo de el doctor Frank-N-Furte en la obra de teatro “The Rocky Horror Picture Show” que organiza el grupo de amigos de la película. En el film también aparece Emma Watson, que lo hace bastante bien.
En definitiva nos encontramos ante una historia dura, pero llena de esperanza, de buenos momentos y situaciones geniales, propiciadas por el grupo de amigos que Charlie (el protagonista) encuentra. Es más, ojalá yo hubiera tenido, durante esa época, unos colegas así de interesantes y afines a mi rollo.
