Las series del verano
Estas son algunas de las series que han llegado durante este verano:
Supernormal
Miren Ibarguren llevaba varios años desaparecida de la televisión y había quedado inmortalizada por su personaje de Soraya en la serie Aida. Ahora de la mano de Olatz Arroyo llega a Movistar+ con una propuesta fresca y diferente, la serie Supernormal. Las líneas que separan el trabajo y todo lo demás no existen: Patricia se lleva el trabajo a casa y la familia a la oficina. Es inteligente, divertida, leal, tierna, ambiciosa e insoportablemente exigente. Su marido Alfonso, sus hijos y los empleados la adoran y odian a partes iguales. Patricia no conoce límites, pero cuando se los salta y necesita alguien para solventar los problemas, su secretaria Marisol y su familia serán imprescindibles para apañar soluciones.
El material se centra en lo cotidiano en la vida de cualquier mujer, madre, trabajadora y exitosa. A simple vista pareciera un producto insustancial, manido, pero en las manos apropiadas de guionistas que les interesa otro tipo de humor el resultado es asombroso. Supernormal no utiliza el humor bufón, paródico o negro, se apega al formato de falso documental dándole una perspectiva mas graciosa. Tiene algo de Vida perfecta con Leticia Dolera y otro tanto de Papá se fue de viaje, pero centrado en la figura materna. El espectador no se va a reír con situaciones, tampoco con diálogos, sino con la manera en que Patricia resuelve sus conflictos durante 20 minutos.
Movistar tiene olfato para triunfar en este género, no en la comedia física, sino en esa donde se mezcla la reflexión con el humor inteligente. Ibarguren eclipsa a todo el casting, dueña y señora frente a la cámara, nada que ver con sus anteriores trabajos y eso es lo mejor, supera el reto de desprenderse del estigma. Otra que enamora es Gracia Olayo, esa vis cómica natural, ese duelo que estable con Patricia, sencillamente es fantástico. Evidentemente habrá una segunda temporada, nadie lo dude y yo me apunto porque ojalá todas las series en la actualidad tuvieran algo, aunque sea un poco de Supernormal
Dr Death
Peacock es de todas las plataformas de la actualidad, la más joven, en su catálogo cuenta con apenas producciones. Sin embargo con su serie Dr. Death demuestra más solidez que otras que mensualmente estrenan 20 series.
Cuenta la historia real de el Doctor Christopher Duntsch, una estrella de la comunidad médica de Dallas. Con el número de víctimas en aumento, dos cirujanos compañeros del mortal doctor y un joven asistente abogado del distrito, intentan parar la sangría. El morbo aparece y despierta la curiosidad cuando se sabe que algo es basado en hechos reales. No es una serie que se anda con rodeos, va directo al grano desde los primeros minutos.
Kim So-yong resuelve todo en 8 episodios de 44 minutos, con montaje paralelo nos adentra en la vida de Duntsch un psicópata que destruyó la salud de muchos de sus pacientes. Desde el punto de vista de perfiles psicológicos, pienso en Brady Hartfield de Mr Mercedes, porque ambas series tienen similitud en el guión. Dr Death es un trhiller, ni una serie médica, tampoco un estudio de personajes o algo procedimental.
No veía a Josua Jackson desde Little Fires Everywhere, se hizo popular con Dawson’s Creek, pero lo cierto es que no había tenido un papel relevante hasta ahora (Sin contar Fringe). Le queda bien lo cínico y enfermizo del doctor. Alec Baldwin y Christian Slater, son los superhéroes de la historia, dos actores que nunca me han convencido.
Esperemos que Peackok siga por esta línea, ya que Dr Death es una serie interesante.
American Horror Stories
Ryan Murphy con el estreno de su serie American Horror Story nos dio esperanzas a los seguidores del género y creó una de las antologías más sólidas de los últimos años en la televisión. Actualmente cuenta con 10 temporadas y aunque todas no tengan la misma calidad, lo cierto es que de manera conjunta es fantástica. El productor queriendo ampliar este universo confía en nuevos talentos para que asuman la dirección del Spin off American Horror Stories, un error monumental que definitivamente no debió filmarse.
La serie cuenta con varios episodios independientes entre sí al estilo “Masters of Horror” o “Black Mirror”. Al igual que en la original no se necesita conocer las tramas para entender estos nuevos episodios. La intro vuelve a ser la misma en diseño y música solo cambian las imágenes. El primer capítulo tiene puntos de conexión con Murder House, en mi opinión de las regulares de la serie. Una casa donde ocurrieron asesinatos y los nuevos inquilinos comienzan a perder la razón, más de lo mismo, ahora con la melodía de Kill Bill.
A veces las primeras impresiones no son las mejores y decidí darle otra oportunidad, con su 3º capítulo. Resulta que esta historia de autocine y película maldita era peor que el anterior. Los nuevos directores parecen decididos a matar el género; Fox contrató a Loni Peristere, Manny Coto, Sanaa Hamri, Eduardo Sánchez, Max Winkler y Sarah Paulson. Para el 4º esperaba un milagro que nunca sucedió, un argumento de youtubers absurdo. Se nota que la mano de Murphy no está aquí, no hay elegancia en la puesta en escena, las tramas no son originales y cuando llega el punto de clímax de los asesinatos todo es puro montaje.
Fox no debió atreverse a estrenar una serie como esta, donde ni siquiera el reparto es capaz de salir airoso. Matt Bomer siempre es él, actuar no es lo suyo. Paris Jackson, le ocurre que no ha salido de las pasarelas, los demás casi todos jóvenes improvisando. Increíblemente el episodio que conecta con Coven es hasta este momento el mejor de la serie, veremos cómo sigue.
Gossip Girl
Joshua Safran (Soundtrack ,Quantico) junto a HBO Max reviven la historia adolescente de Gossip Girl muy famosa en el 2007. Ambientada 8 años después de los acontecimientos narrados en la original y centrada en una nueva generación de adolescentes de escuelas privadas de Nueva York que utilizan las redes sociales para difundir chismes.
Cuando se estrenó la original yo no veía series pero estoy segura que era mejor que este ridículo cuento de niños que hacen bullying y visten bien. Elite merece Emmy al lado de esto. Cuando se reinicia cualquier historia, independientemente de que repitas la fórmula debes darle algo nuevo, en esta Gossip Girl todo es inadmisible.
El guión no se escribió, tal pareciera que cada capítulo transcurre en una lectura conjunta de libreto, una prueba de casting. Los diálogos van más allá de lo pueril y banal, porque parece que toda esta generación es así. Que falta hacen series como HIT, productos que le hablen a los jóvenes desde la inteligencia y la polémica sin sobrevalorarlos. Ni siquiera las escenas de sexo, o las pasadas de tono son convincentes.
Luego tenemos el desastroso reparto, Kristen Bell, Jordan Alexander, Eli Brown, Adam Chanler-Berat y Thomas Doherty, por el bien de todos no deberían estar frente a una cámara. Lo peor de todo es que HBO Max la renueva.