Yo, Tonya
Lo confieso, soy una loca de los “biopic”, cuando veo que se va a rodar uno cojo rápidamente la agenda y me lo apunto para verla nada más la estrenen…
Pues bien la película de la que vengo a hablar esta semana se trata de “Yo Tonya“, basada en la historia real de Tonya Harding (Margot Robbie) que fue la primera patinadora en lograr el triple axel completo en los juegos olímpicos de 1994 , su vida a partir de este momento fue una vida llena de éxito y logros hasta que aparece su competidora y causante de su decadencia Nancy Kerrigan.
Nancy empezó a ser la favorita de todos, vestía los mejores vestidos en el hielo, la patrocinaba más gente y sobre todo se convirtió en la favorita de America…
Tonya tiene una madre que es un tanto peculiar interpretada por la genial Allison Janney (Mom), que la obliga desde niña a ser la mejor, también tiene un marido interpretado por Sebastian Stan (Los Vengadores) que es un tanto violento.
La historia continua y aquí está toda la polémica que se suscit
ó en la época, cuando antes de un campeonato un individuo da con un bate de béisbol a la idolatrada Nancy Kerrigan y la primera sospechosa es la propia Tonya Harding al saber los celos que tenia hacia la chica.
Poco a poco van saliendo sospechosos entre los que se encuentran el marido y un amigo de éste que también acusan a la propia Tonya.
La cinta está nominada a los premios Oscar 2018: mejor actriz de reparto para Margot Robbie, el de mejor actriz secundaria para Allison Janney, y mejor montaje.
Margot Robbie hace un papel fantástico, me enamoró en El lobo de Wall Street en la que hizo de la amante de Leonardo DiCaprio, y aquí hace un papelazo, me gusta que actrices que son denominadas como sex-simbol no se encasillen y busquen nuevos horizontes interpretativos, y que se afeen un poco para hacer bien su papel.
Allison Janney está de Oscar (nunca mejor dicho) haciendo de madre de Harding, de lo mejor de la película. La odias y amas a partes iguales, todas mis papeletas van dirigidas hacia ella…
En líneas generales es una película entretenida con la que te divertirás, llorarás y gritarás muchas veces de desolación, por las situaciones vividas por cada personaje.
Lo mejor: Las interpretaciones de Robbie y Janney, son geniales y su química en pantalla es de lo mejor.
Lo peor: La estética de película, de mediodía, de fin de semana.
