Sobreviviendo a la Navidad
No sé como he tenido el valor de ver esta película de Mike Mitchell, donde han juntado dos de las cosas que detesto: La Navidad y Ben Affleck. Estoy hablando de Sobreviviendo a la Navidad. Y eso es precisamente lo que he tenido que hacer yo mientras la veía.
Sinopsis de la película
Drew Latham (Ben Affleck) no quiere pasar la Navidad solo, tras discutir con su novia. Por eso, el rico ejecutivo decide regresar a la casa de su familia para recordar las navidades de cuando era pequeño. El problema con el que se encuentra es que las personas que viven en la casa de su infancia, no son su familia.
Aún así, Drew está decidido a pasar unas fiestas navideñas tradicionales y para ello ofrece a la familia que actualmente reside en la casa una cantidad ingente de dinero con la condición de que le dejen pasar las fiestas en su casa y finjan que es su hijo.
El padre de familia (James Gandolfini) no duda ni un segundo en aceptar el dinero, pero lo que no se espera es que la gran cantidad de pasta empieza a ser pequeña cuando conocen en profundidad a Drew y su idea de como tiene que ser la Navidad.
La trama aun se complicará más cuando la hija mayor de la familia vuelve a casa, Alicia (Christina Applegate) piensa que a su familia se le ha ido la cabeza y por ningún motivo piensa aceptar a su “nuevo hermano”.
Crítica de la película Sobreviviendo a la Navidad
La película fue nominada a 3 premios Razzie (Premios a las peores películas del año) en 2004: Peor película, actor y guion. A Ben Affleck le quitó el reconocimiento de peor actor: George W. Bush, con que imaginaos el nivel.
Sobreviviendo a la Navidad es una película previsible, básica, insustancial, trivial y carece totalmente de interés. De hecho, el único momento de la película que llama la atención es el que ilustra la imagen que encabeza este post, donde Gandolfini le arrea con una pala en la cabeza a Affleck.
Suelo buscar este tipo de películas, como excusa para criticar la Navidad y todo lo que implica, pero en esta ocasión el film es tan malo que ha pasado por encima de la festividad en si.