Un domingo cualquiera es una película de finales de los 90, dirigida por Oliver Stone y protagonizada por Al Pacino, en la cual se cuenta la historia de un equipo de futbol americano que va de capa caída. Ya sé que la cosa no pinta bien, pero dentro de lo que cabe la peli no está mal, con el limitado margen que puede dar una película que hable de futbol…
El film no se centra en los partidos, ni en la acción… sino que toca todo lo que rodea al futbol americano, los problemas y las situaciones escabrosas que se producen, casi siempre por culpa del dinero. En concreto se centra en la figura del entrenador de los Tiburones de Miami D´Amato, interpretado por Al Pacino, de la estrella emergente encarnada por Jamie Foxx y la propietaria del equipo (Cameron Diaz, cuando todavía su cara tenía facciones normales), la cual está en constantes rifirrafes con el entrenador.
El reparto sigue engordando con nombres como Dennis Quaid o James Woods, pero a pesar de ello, Stone no consigue sacar un gran producto ni nada que se le acerque, solo una película que puede resultar entretenida a la gente que sigue esta clase de deportes o que no tenga nada que hacer un domingo cualquiera. Salvando algunos momentos concretos y sobre todo alguna parrafada, tan característica ya, de Al Pacino.
“He metido la pata en todo lo que un hombre de mi edad podía meterla,[…] pero ahora, de ustedes depende: O aprendemos a pelear como un equipo o perderemos como individuos”
