El bar Coyote
El Bar Coyote va entre película musical, drama, comedia, romántica… la verdad que tiene todos los ingredientes para ser un taquillazo y así fue. Canciones pegadizas mezcladas con actrices sensuales bailando sobre la barra de una bar hizo que la gente acudiese en masa a ver la película protagonizada por la novata Piper Perabo (Doce en casa), Maria Bello (Niños grandes), Tyra Banks o el guaperrimo (en esa década) Adam Garcia (Los Chicos de mi vida) sin olvidar al padre de la protagonista John Goodman (El gran Lebowski).
Para entrar en faena, por si alguien aún no la ha podido ver (está en Netflix actualmente), la historia ronda en torno a Violet Sanford una joven compositora que sueña con que alguien escuche una de sus maquetas y la ayuden a conseguir su sueño. La joven viaja hasta Nueva York, con poco dinero y lo justo para vivir. Cuando se pone a buscar trabajo encuentra un pequeño local llamado “Coyote Ugly” en el que Lil le da una oportunidad.
En ese local las chicas bailan sobre la barra, tiran agua, hielo, es todo diversión y es el local de moda de la zona. Una noche se forma una trifulca y Violet se sube a la barra a cantar, cosa que a ella le horroriza porque tiene miedo escénico, en ese instante cambia todo. Conoce a Kevin O`Donell que se convierte en su gran apoyo a la hora de enviar las maquetas y de cantar cara al publico. Y como no, se enamoran perdidamente.
Al final todo acaba como en todas estas películas, con la protagonista consiguiendo su sueño y al chico, por supuesto, con escenas escenas previas de tensión, típicas en estas películas…
El culmen de esta película es el final cuando cantan la famosa canción “Can’t Fight the moonlight this” con LeAnn Rimes que es la interprete original de la canción.
Cuando empiezas a ver El bar Coyote sientes que es la típica película, como he dicho anteriormente y así es. Es la típica película, pero una cosa tengo clara, que no la podrás sacar de tu cabeza porque todo lo que pasa en el Bar Coyote se queda en el Bar Coyote.