El halcón maltés
Hoy os vengo a hablar del clásico El halcón maltés de 1941.
Sinopsis de la película
En el siglo XVI, los Caballeros de la Orden de Malta le regalaron a Carlos I de España y V de Alemania una estatuilla con forma de halcón de oro macizo con incrustaciones de piedras preciosas. Era una muestra de gratitud por ciertas prerrogativas que el monarca les había concedido.
Sin embargo, la joya no llegó nunca a manos del Emperador, ya que la galera que la transportaba fue asaltada por unos piratas.
400 años después, el detective privado Sam Spade (Humphrey Bogart) acepta el encargo de una joven que quiere encontrar a su hermana, que ha desaparecido con un hombre sin escrúpulos.
Esta película escrita y dirigida por John Huston, y es una adaptación de la novela de Dashiell Hammett.
Reseña de la película
El halcón maltés es una de las películas más importantes e influyentes de Hollywood. Esta película aportó un estilo totalmente nuevo para contar las historas del cine negro.
Inicialmente El halcón maltés puede parecer impulsado por la trama, pero cuando se considera que el halcón es en realidad un MacGuffin (elemento de suspense que hace que los personajes avancen en la trama), la película se puede ver más como un estudio de personajes. Spade actúa como lo hace no para honrar a la ley, sino para cumplir con su propio código personal de honor, e inflige dolor tanto a sí mismo como a otros en el proceso. Sus acciones desafían la creencia de que el amor puede conquistarlo todo. En esta película y en la visión del mundo de Spade, ese no es el caso.
No discutiría que El halcón maltés es la mejor historia de detectives de la gran pantalla, pero es el progenitor de innumerables películas, pocas de las cuales alcanzaron su nivel. Y aunque la película ofrece menos sorpresas al público actual de lo que habría proporcionado a aquellos que la veían hace más de 60 años, principalmente porque muchas de las innovaciones llevadas a la pantalla en El halcón maltés se ha convertido en parte del léxico cinematográfico cotidiano.
En cuanto al aspecto visual, Arthur Edeson (director de fotografía) usa la luz y la sombra liberalmente y nada de lo que transcurre en El halcón maltés lo hace bajo la luz del sol. Las escenas de la calle están en la oscuridad de la noche y, con excepción de la Oficina de Spade y el salón de dibujo de Gutman (Sydney Greenstreet), pocos sets están bien iluminados. Huston utiliza ángulos de cámara interesantes para variar el aspecto visual de la película. Greenstreet, por ejemplo, siempre se filma desde abajo para que llene y domine la escena.
En pocas palabras, El halcón maltés es una obra maestra del cine negro, y muy difícilmente podría llegar a ser superada.