En Filmfilicos seguimos ocupándonos de las películas que optan a conseguir premios Oscar en 2014. Y, ahora, ha llegado el turno de Capitán Phillips.
Con seis nominaciones (entre ellas la de mejor película), Capitán Phillips se basa en la historia real del secuestro del barco mercante Maersk Alabama por parte de piratas somalíes en 2009. El capitán Phillips y su tripulación navegaban por una de las zonas marítimas más peligrosas del mundo cuando cuatro personas subieron a bordo y capturaron el barco y a su tripulación a la espera de un rescate millonario.
El estreno de esta película ha reavivado la polémica y despertado las críticas sobre la verdadera heroicidad del Capitán que, según su tripulación, no fue tan héroe sino más bien un inconsciente.
Fuese como fuese en la realidad, el capitán Phillips de la película, personaje interpretado por Tom Hanks, es un héroe en mayúsculas. De esos héroes de los que las películas americanas suelen presumir. También se presume, quizás en exceso, de los servicios de rescate de la marina estadounidense.
La cara opuesta es la que protagonizan los piratas. En la película se puede ver el drama de muchos jóvenes somalíes que son utilizados por las mafias para arriesgar sus vidas secuestrando barcos en el océano. Se muestra cómo son personas sin nada que perder que aceptan (e incluso piden) ser elegidos por las mafias para formar parte de sus bandas. Piensan que es una gran oportunidad que les hará ricos y les sacará de la miseria. Lo cual, después, no sucede.
Lo mejor de la película son las actuaciones de los dos capitanes. Secuestrado y secuestrador, Richard Phillips (Tom Hanks) y Muse (Barkhad Abdi), protagonizan grandes escenas de tensión y desesperación.
