La trinchera infinita
Después de unas cantas películas españolas seguidas que ni fu ni fa, por fin he podido ver una realmente interesante. Se trata de La trinchera infinita dirigida por el trío: Jon Garaño, Aitor Arregi y José Mari Goenaga. El guión lo escribe este último junto a Luis Berdejo.
De que trata la película
Basada en hechos reales, La trinchera infinita nos cuenta la historia de Higinio (Antonio de la Torre) y Rosa (Belén Cuesta) que llevan unos pocos meses casados cuando estalla la Guerra Civil, y la vida del marido pasa a estar seriamente amenazada. Corre el año 1936.
Aunque intenta huir, el miedo a ser detenido y a las posibles represalias, además del amor que siente por su mujer, a la que no puede abandonar, les condenará a ambos a un encierro que se prolongará durante más de 30 años.
Con ayuda de Rosa, Higinio decide utilizar un agujero cavado en su propia casa como escondite provisional. Y a partir de ahí se desarrolla todo el film.
Además de los dos protagonistas en la película interviene: Vicente Vergara, José Manuel Poga, Emilio Palacios, José María del Castillo, Carlos Bernardino, Adrián Fernández y Esperanza Guardado, entre otros.
Crítica de la Trinchera infinita
Como he comenzado diciendo la película es interesante. Lo que más destaca sin duda es la enorme interpretación de ambos protagonistas. De hecho le supuso el Goya a mejor actriz para Belén Cuesta este año. Y no deja de sorprender, al menos a mi, ya que siempre la había visto en papeles cómicos, haciéndolo muy bien, pero en esta ocasión con toda la carga dramática de su personaje, lo borda.
La historia que se cuenta y como se cuenta (en tan poco espacio) es interesante y sobrecogedora. Más sabiendo que varias personas tuvieron que pasar ese calvario durante tantos años. Pero lo más duro para mí es ver como, aun con el paso de tantos años, ha llegado hasta nuestros días ese odio y esos comportamientos. Y no me refiero al de los dos protagonistas, si no a los malnacidos (por no utilizar otros improperios) que les rodeaban.