Project Almanac
Producida por Michael Bay, Project Almanac es el primer largometraje del realizador Dean Israelite.
David Raskin es un joven que, mientras trabaja en un proyecto científico con un grupo de amigos, descubre que su padre era poseedor de un gran secreto, la manera de construir una máquina del tiempo.
Si algo define a Project Almanac es su irregularidad. Tras un fascinante inicio que hace presagiar una nueva y original versión sobre el más que usado tema de los viajes en el tiempo, la película frena gradualmente hasta llegar a la parada casi total.
Debido a un punto de inicio que nos presenta a unos Goonies creciditos que encuentran un modo de emular a Doc y Marty McFly (Back to the future), la ilusión por un producto interesante se acrecenta.
Un ritmo ágil, un montaje que mezcla espacio con tiempo y una cámara que insistentemente graba en plano subjetivo, de la mano de la hermana del protagonista, se convierten en un arma de doble filo puesto que, siendo estos aspectos los que en un primer momento atraen al espectador, con el paso del tiempo, llegan a ser abusivos.El tiempo curiosamente se convierte en el punto débil de la película. Acciones y espacios rehiterativos acaban por ganarle el pulso a un argumento que ya de por sí resulta algo monótono. De este modo lo que parecía que iba ser una interesante vuelta de tuerca a las películas del género no pasa de ser un entretenimiento aceptable.