Si llevas tiempo leyendo lo que publico por aquí, ya sabrás que me gustan mucho las pelis de adolescentes. Pero no las pastelonas, ojo. Aquí no vas a encontrar referencias a “3 metros sobre el cielo” ni dramas moñas de instituto con más filtros de Instagram que argumentos. Me gustan las historias con carne, con conflictos reales, con esa intensidad tan suya. Y por eso, un año más, celebramos con entusiasmo la llegada del ciclo High School dentro del 40 Cinema Jove de València.
Del 20 al 28 de junio, la plaza de Viriato volverá a transformarse en un cine al aire libre que, además de fresquito (bueno, con las temperaturas de estos días el fresquito es relativo) y encanto, ofrece una programación que reflexiona sobre adolescencia, educación y vínculos intergeneracionales. Y lo hace desde todas las ópticas posibles: drama, comedia, documental, cine clásico o indie contemporáneo. Todo cabe aquí, mientras tenga algo valioso que decir.
Este año, la edición del ciclo pone especial foco en la figura del profesorado, y lo hace con títulos como Rebelión en las aulas (James Clavell, 1967), ese clásico donde Sidney Poitier se enfrentaba a una clase díscola en Londres con más paciencia que un santo. Años después, el documental español El método Farrer (Esther Morente, 2023) recoge ese testigo desde la emoción y la cercanía, mostrando cómo los profesores también marcan nuestras vidas más allá del aula.
Pero esto va mucho más allá del pupitre. Este 2025, High School abre el zoom hasta la infancia con Un pequeño mundo (Laura Wandel, 2021), dejando claro que la adolescencia no empieza en la ESO, sino mucho antes, cuando aprendemos a convivir, a sufrir y a defendernos en los patios del cole.
Además, vuelve uno de los sellos del ciclo: rescatar óperas primas de directores que hoy son consagrados. Este año tenemos Brick (Rian Johnson, 2005), una rareza noir ambientada en un instituto; y Juno (Jason Reitman, 2007), ese peliculón que ya es generacional y que habla del embarazo adolescente sin caer en moralinas, con Page y Michael Cera en estado de gracia.
También hay espacio para los retratos más duros, como Bully (Larry Clark, 2001), donde la violencia juvenil se muestra sin edulcorantes, o Paranoid Park (Gus Van Sant, 2009), que combina skate, culpa y una mirada casi poética al desasosiego adolescente.
Para quienes buscan emociones más actuales, la cartelera incluye ¿Estás ahí, Dios? Soy yo, Margaret (Kelly Fremon Craig, 2023), que retrata con sensibilidad el torbellino hormonal de la pubertad, y Después de Lucía (Michel Franco, 2012), un drama mexicano sobre el acoso escolar que no deja indiferente.
Y si todo esto no te parece suficiente, súmale el documental Backstage, que explora la trastienda emocional de jóvenes músicos, entre inseguridades, redes sociales y nuevos modelos creativos. Mención especial al grupo valenciano Zoo, que aquí aparece como guiño local y cierre de etapa.
Como ya es tradición, el ciclo High School viene acompañado de una fiesta de bienvenida y otra de fin de curso, para vivir la experiencia como si fuera tu graduación (pero sin deberes ni exámenes).
Si buscas cine que te remueva, que te diga algo y además se vea bajo las estrellas… ya sabes dónde tienes que estar.