El secreto de Adaline
El secreto de Adaline cuenta la historia de Adaline Bowman, una chica nacida a principios del siglo XX que, tras un accidente, obtiene el don de la eterna juventud. Con la apariencia permanente de una chica de 29 años, Adaline deberá enfrentarse a las desavenencias que la vida pone en su camino.
No quería contar más del argumento, sencillamente porque con sólo una brevísima sinopsis podemos suponer lo que va a acontecer a lo largo de la película.
Lo cierto es que si algo me impulsó a verla fue Blake Lively (quién dio el salto a la fama con su papel de Serena van der Woodsen en la serie Gossip Girl), ya que me parece una excelente actriz (desde aquí aprovecho para recomendar La vida privada de Pippa Lee, una película algo desconocida, sencilla, bastante entretenida y decente, con un reparto muy bueno). Harrison Ford, exceptuando el que haya retomado su papel de Han Solo en próximas secuelas de Star Wars, está en horas bajas, al menos en cuanto a la elección de trabajos se refiere. Completan el reparto la magnífica Ellen Burstyn (a quién recordaréis por Réquiem por un sueño), Michiel Huisman (sus últimos trabajos han sido en dos grandes series de televisión: Juego de tronos y Orphan Black) y Kathy Baker (tiene un papel en Boulevard, una de las últimas películas de Robin Williams).
Y sí, las interpretaciones son correctas, al igual que el apartado técnico y artístico (de hecho la fotografía, que corre a cargo de David Lanzenberg, me resulta muy elegante; de este mismo director de fotografía encontramos Ciudades de papel, un inminente estreno en cines españoles). Lo único que falla en esta cinta es, sin ninguna duda, el guión. No porque la idea no sea buena, porque creo que pensando en alguna similar citaría El curioso caso de Benjamin Button, lo cuál sería bueno si no fuese porque el film de Fincher está a años luz de esta ñoñada palomitera. Y como ya dice mi perfil, me encantan los dramas románticos… pero hasta cierto punto. Esta es una película de Antena 3 con actores de Hollywood de nivel, desaprovechados en un guion azucarado y tan previsible que a veces resulta insultante. No hace falta haber visto mucho cine para suponer qué va a pasar en absolutamente cada punto de la película: no hay sorpresas. También es cierto que indagando, he encontrado que de los dos guionistas, Salvador Paskowitz y J. Mills Goodloe, éste último fue uno de los encargados del guion de la película Lo mejor de mí (basado en una novela de Nicholas Sparks), así que poco más tengo que añadir.
El joven director, Lee Toland Krieger, a pesar de todo lo que he dicho, creo que cumple con su labor de un modo bastante aceptable a pesar de contar con este guión. De hecho, uno de sus anteriores trabajos, Celeste and Jesse Forever (dónde además contó con el mismo director de fotografía que Adaline), recibió buenas críticas y en general parece una opción mucho más atractiva para disfrutar de una película una tarde de verano.
No obstante, tampoco la tacharía de ser una película infame: si te gustan las películas románticas de las ñoñas (que no es ningún pecado), sin duda en El secreto de Adaline encontrarás lo que buscas. Si lo que quieres es un buen drama romántico (exceptuando algunas escenas de Ellen Burstyn, que junto a Blake Lively me parece de lo mejor de la cinta)… esta no es tu película.
P.D: Como curiosidad, para interpretar a Harrison Ford de joven escogieron nada más y nada menos que a Anthony Ingruber; seguramente a algunos os suene por un vídeo viral que subió a Youtube dónde demostraba su gran parecido con el actor. Os dejo el link del vídeo AQUÍ.