El silencio de otros
Hay películas que sabes que te van a emocionar ya de antemano, que te va a remover por dentro y que son de obligado visionado. Es el caso de “El silencio de otros” un documental español de Almudena Carracedo y Robert Bahar, que consiguió numerosos galardones incluido el Goya a Mejor documental.
Sinopsis de El silencio de otros
El documental, filmado a lo largo de seis años, acompaña a víctimas y supervivientes del largo régimen de Franco y que han llegado silenciados hasta la actualidad. En su búsqueda de justicia, de sus familiares desaparecidos, incluso de sus hijos robados, llegamos a ver a los involucrados en lo que se ha denominado la “Querella Argentina” que se puso en marcha el 14 de abril de 2010 ante los tribunales de justicia de Argentina y que pretende combatir el “pacto del olvido” acordado entre los políticos españoles para dejar enterrado todo lo sucedido durante la dictadura franquista.
Después de décadas de silencio, la sociedad española supo que centenares de niños fueron robados antes y durante la dictadura. Pero no sólo eso, ya que el documental abarca torturas, ejecuciones extra judiciales, el tema de las fosas comunes, y todo un proceso judicial internacional. A través de las historias de los protagonistas de “El silencio de otros” se puede entrever la lucha de un país que quiere reconciliarse con su pasado y no olvidarlo, sino recordarlo y conocerlo para que no se vuelva a repetir y sobre todo para conseguir la justicia que todavía no ha llegado.
El objetivo de esta acción legal es conseguir que se investiguen los crímenes de lesa humanidad cometidos por los integrantes de la dictadura franquista, se identifiquen a sus responsables y se los sancione penalmente. ¿Se conseguirá?
Reseña del documental
Bueno. Sin duda El silencio de otros es un documental de obligado visionado si tienes un mínimo de decencia. La historia española contada desde el punto de vista los perdedores. Lo que no se suele contar, lo que no se enseña en los colegios, lo que siempre se ha querido “silenciar” y “olvidar”.
No entraré en mucho detalle porque si me conocéis ya sabréis lo que opino. Lo único, que como siempre he pensado, la transición, solo sirvió para recolocar a los franquistas en otros puestos, pero la dictadura no llegó a terminar (del todo).
Y lo último, y os dejo ya que sigáis con vuestras cosas: En ocasiones, que asco me da la humanidad.