Persépolis
Por primera vez, desde que colaboro en Filmfilicos, voy a hablar de una película francesa. Seguramente, no será la última. Pero bueno, tampoco quiero adelantar mucho y voy a mi elegida de hoy.
Persépolis es una película de animación francesa que me gusta mucho. ¿Por qué? No seáis impacientes, más abajo lo diré que primero quiero que sepáis más sobre ella. Como iba diciendo, Persépolis es la adaptación cinematográfica del cómic autobiográfico de la iraní Marjane Satrapi y consiguió sendas nominaciones a los Oscar y a los Globos de Oro como mejor película de habla no inglesa en 2008.
La historia de Persépolis comienza en Teherán en 1978. Marjane sólo tiene 8 años cuando se empieza a producir el importante cambio político y social del país que acaba con el régimen dictatorial del Sha, tras décadas de reinado. Marjane proviene de una familia de clase alta y progresista que ha luchado a favor de la revolución. Tras años de guerra, finalmente Irán se convierte en un país dominado por el fundamentalismo islámico y con ausencia de libertad. Algo que muchos de los que propiciaron y defendieron la revolución no querían que ocurriera. Muchos se sintieron decepcionados por el cambio que se estaba produciendo. Ante esta situación, la familia Satrapi decide mandar a la adolescente Marjane a Viena donde podrá crecer en libertad. Sin embargo, la vida tampoco es fácil para ella fuera de su país.
A mí me gusta mucho Persépolis porque es una película sobre la historia reciente de Irán contada de una manera muy sencilla, a través de los ojos de una niña inocente. Con ella, vamos viendo los cambios en la sociedad iraní a medida que ella evoluciona y descubre la historia de su país y de su familia, así como la nueva realidad de Irán. Lo que pasa en el país es terrible en muchos sentidos: guerra, masacres y un régimen dictatorial religioso. Sin embargo, después de todo, Marjane es una afortunada que tuvo la posibilidad de salir de su país y vivir en libertad, a pesar de todo el significado que tiene eso.