Atlas
Netflix tiene otro bodrio de ciencia ficción, con la dirección de Brad Peyton en uno de sus peores trabajos. Os hablo de Atlas.
Una analista de inteligencia se queda varada en un planeta lejano y debe aprender a utilizar una armadura robótica de uso militar para sobrevivir.
Es larga, extenuantemente larga y absurdamente mediocre, pero analizando la trayectoria de Peyton quien se encargó de San Andrés, de Proyecto Rampage y Viaje al centro de la Tierra 2, era imposible que saliera otro tipo de film.
Atlas es un dramón con efectos, quiero decir, con malos efectos, que inicia como un Terminator y termina como Transformers.
No hay un tratamiento coherente de la historia, de crítica a la lucha entre IA y humanos, mucho menos hay personajes sólidos. Es el tipo de película ruidosa, comercial y que no entretiene porque no puedes sostener tanto metraje sin un guion adecuado.
Jennifer López es la protagonista y además la productora, es de admirar su empeño constante por demostrar que puede ser versátil aunque nunca lo consiga, pues papel tras papel nos va demostrando que no nació para actuar.
Atlas es de las cosas más espantosas de Netflix en lo que va del 2024, pero eso, al parecer, es inversamente proporcional para sus ejecutivos.