Cuando emprendemos la aventura de irnos a otro país por tiempo indefinido, a un lugar bastante alejado de nuestro hogar, sabemos que de última podemos volver…lo único que nos separa es un pasaje de avión.
Sabemos que podemos estar en contacto permanente con nuestros seres queridos.
Sabemos que los volveremos a ver.
En una era regida por la globalización, los avances en tecnología y comunicación, nos suena inconcebible no dar todo lo anterior por sentado.
Pero no hace mucho tiempo atrás, irse a buscar una nueva vida lejos de casa era literalmente un borrón y cuenta nueva. Y básicamente es de lo que «Brooklyn» trata.
«Brooklyn» compite a los Oscars 2016 por “Mejor Película”, “Mejor Actriz” y “Mejor Guión Adaptado”. Film del Reino Unido dirigido por John Crowley y protagonizada por Saoirse Ronan (Grand Hotel Budapest), Emory Cohen y Domhnall Gleeson (The Revenant).
La historia es ambientada en 1950 y gira en torno a Eilis, una chica de Irlanda que no encontrando nada que la ate a su país de origen, decide forjarse una nueva vida en Estados Unidos. En Nueva York sufrirá el desarraigo, sobre todo extrañando a su hermana, pero esto cambiará con la llegada de un chico italiano que dará una nueva perspectiva a su actual vida.
Puedo decir que «Brooklyn» fue una película que sabía de antemano que me iba a gustar. Amo las tramas de inmigración post guerra, y si a eso le sumamos Nueva York y romance no empalagoso…me parece perfecta. Cuenta con muy buenas actuaciones, ambientación y un guión que le da constancia a la trama.
Pero sinceramente, no la veo como una película “material de Oscars”.
No me malinterpreten: me gusta que esté nominada. Pero me sorprende que lo esté cuando estamos acostumbrados a otro tipo de films para ser considerados en la categoría: los dramas británicos románticos de época son poco comunes (el único ejemplo que se me viene a la mente de los tiempos más o menos actuales es Titanic).
Para rematar la idea, doy un ejemplo de película que nadie duda que entra dentro de “material de Oscars”: “12 años de Esclavitud”. Superproducción de época con excelentes actuaciones, bla, bla, bla…pero, sinceramente, olvidable. Cumplía con todos los requisitos para ser ganadora…pero más de lo mismo. Competía con “El Lobo de Wall Street”, para nada el típico material de la Academia, pero que se lo merecía cien veces más que la final vencedora.
No pienso para nada que vaya a ganar «Brooklyn». “The Revenant” es la ganadora de la noche con toda razón y bien merecido. Pero para futuras premiaciones, espero que se empiece a variar un poco y no se dé el premio al mismo tipo de película siempre.
