Plácido

Creo que voy a terminar, por el momento el repaso a algunas de las películas de Luis García Berlanga y aprovechando que estamos cerca de la época navideña, lo haré hablando de Plácido.

De que trata la película

En una pequeña ciudad de provincias, unas burguesas muy adineradas y ociosas han organizado una iniciativa de cara a las navidades.  En concreto se trata de la campaña “Siente a un pobre en su mesa”. Aunque queda claro ya solo con el lema, el evento implica que los más necesitados compartan la cena de Nochebuena con familias acomodadas y disfruten del calor y el afecto que no tienen. 

Esta iniciativa va acompañada de una gran parafernalia y repercusión mediática que cuneta con el patrocinio de las ollas Cocinex, comenzando con una cabalgata de pobres, seguida de la presentación y subasta de “estrellas de cine” llegadas ex profeso desde Madrid y que acompañarán a los pobres en las cenas de las familias ricas… y finalizará con una aclamada retransmisión radiofónica para agradecer el apoyo de todos sus participantes.

En medio de todo eso, Plácido ha sido contratado para participar con su motocarro en la cabalgada, pero le surge un impedimento que le impide centrarse en su trabajo, ya que ese mismo día vence la primera letra del vehículo, que es su forma de ganarse el pan.

En la película encontramos entre su elenco a Cassen, José Luis López Vázquez, Elvira Quintilla, Amelia de la Torre, Julia Caba Alba, Amparo Soler Leal, Luis Ciges o Antonio Ferrandis, entre otros.

Plácido estuvo nominada a mejor película en el Festival de Cannes y a mejor película de habla no inglesa en los Oscar… ahí es nada. Aquí en España, la cosa pasó mas desapercibida, imaginaos porqué, tratándose de un film del 1961…

Crítica de Plácido

Menudo trabajazo de Berlanga. Según FilmAffinity se trata de la segunda mejor película española, tras otro título del cineasta: El verdugo. 

El sello del director esta claro en este largometraje, con todos esos personajes entrando y saliendo de plano constantemente, dándole un ritmo muy vibrante en todo momento. La crítica social de esta película, es tan bruta y adecuada que, tristemente, sigue estando vigente en nuestros días: La desigualdad entre ricos y pobres, y lo desalmada que es la gente en términos generales. Pero, además, el film está salpimentado con muchos detalles que retratan a la sociedad de aquel entonces, siempre con ese particular humor de Berlanga.

Una joya, vamos. Sin duda estamos ante una obra que todo amante del cine debería ver. 

Y no quiero terminar sin recordar el villancico con el que cierra la película que, si no me equivoco, dio problemas en aquella época, y que sintetiza muy bien todo Plácido: 

«Madre en la puerta hay un niño y gritando está de frío, ande dile que entre y así se calentará, porque en esta tierra ya no hay caridad, ni nunca la ha habido ni nunca la habrá»